Crítica a Martyr o La Muerte de Santa Eulalia

La siguiente crítica apareció hoy en The Beverly Hills Outlook. La reproducimos aquí gracias al gentil permiso del autor.

DE LA BOVEDA:

Martyr o La Muerte de Santa Eulalia

CRITICA DE CHARLES LONBERGER

Pachamama Films ingresa al escenario mundial el 2005 con el lanzamiento de este original y valiente estudio de una relación que atraviesa su final. Para una compañía donde se unen las sensibilidades europeas y sudamericanas, es de alguna manera apropiado que los dos continentes se encuentren a medio camino y filmen esta melancólica historia en New York.

Michael Trodoux y Carmen Paintoux

La producción se toma a si misma y las relaciones que muestra, seriamente, pero, de la manera que está escrita por Jac Avila, no evita ser melodramática. Esto disfraza una cierta auto-compasión en mostrar a un Dominante como la verdadera víctima y, ciertamente, el personaje de Tadeusz, que se reconoce como “algo sádico” es en la realidad el que hace el verdadero sacrificio en una muerte por homicidio.

Tadeusz instruye a Camille

A pesar del tratamiento denso y esquemático que Avila dá a la película, ésta logra su proposito, gracias a la habilidad de ficcionalizar la travesía personal de su personaje principal, Camille, y su coraje cuando en su encrucijada, exhibe una “pasión en el momento mismo de la muerte“, y busca “paz despues del sufrimiento“.

Camille interpreta el sufrimiento de la martir.

La narrativa trata de forma única y con angustiante y emocional honestidad, la disolución de una relación  destinada al fracaso entre un Vainilla y una Kink, sugiriendo que éstos dos núnca deberían encontrarse.

Vainilla Vs Kink

Hay una interesante actitud hacia el cristianismo, manifestada en el guión: por un lado su sádica iconografía es celebrada mientras que, y de manera explícita, la religión misma es criticada (o al menos San Agustín) como misoginista y anti-semíta. Hay una blasfemia implícita al expresar que “Dios manda su única hija” a sufrir en la cruz, representada con multiples versiones.

Capturando el momento

En el fondo, el tratamiento es profundamente romántico, una caracteristica no solo revelada por la mezcla de sonido donde Chopin aparece de manera prominente, pero tambien después, cuando  Camille y Tadeusz conversan en el mas allá, lo que sugiere que el Amor es Mas Fuerte que la Muerte, así como tambien, de manera más perversa, por un beso entre almas gemelas donde comparten sangre menstrual, un gesto donde el Dominante se muestra aceptando la “verdadera naturaleza” (implicitamente vil) de su Sumisa. La naturaleza multinacional de la producción es reflejada por los dialogos hablados en ingles y frances de manera intercambiable.

Camille tiene ciertas demandas

El film tiene exito gracias a la segura dirección de Jac Avila, quien trata un viaje personal moderno como si fuese un Manuscrito Ilustrado,  adaptando así lo medieval a lo contemporaneo.  Usando sobre-imposiciones, planos íntimos, camara en mano y la perspectiva principal omnipotente en su enfoque ojo de ave. Mientras que el efecto acumulado es atmosferico, la escena de la crucifixion de Camille es convincente.  Curiosamente, sugiere al modelaje como una forma de Martirio.

Tadeusz quiere transformar a Gabrielle

La cinematografía del mismo Avila, usando un seudónimo,  y Raphaelle Gosse-Gardet, es llamativa en su imágen, particularmente allá donde se usa una iluminacíon dramática durante las suspenciones físicas. El montaje de Margot Chevallier usa jump cuts de imágenes fijas, contrastando cortes diferentes e imitando imaginativamente el golpe del látigo.

Camille argumenta por el “momento final”.

La música comienza citando vocales del medio oriente, emplea Mozart para el drama y van Bingen para ambientes, mientras que el diseño de sonido ilustra la turbulencia emocional por medio de tormentas de truenos.

Como es de esperarse para un primer largometrage de la compañia, las actuaciónes son algo desiguales.

Baño de sangre

La mejor actuación es entregada por  Carmen Paintoux en el papel de Camille. Ella funde lo físico con lo cerebral, no “se siente muy bien“, “de verdad que lo necesita” y cree que “todos deberían ser forzados a sacrificar“. Ella “sangra de verdad“, sabe “como sufrir“, se baña en su propia sangre y prueba su propia menstruación antres de compartirla con su confidente. Se martirza cuando su identidad se mezcla con  la de la santa que investiga.

Julian se lava las manos

En el papel de, Julian, su novio irremediablemente vainilla, Michael Trodoux “odia las reglas”  no es su onda”, y es celoso hasta el homicidio.  El único problema con su interpretación es que nos deja pensando en el porqué está con Camille, siendo ellos tan diferentes.

Tadeusz el renuente y sensible sádico

En el papel de Tadeusz, Avila practica la fotografía para lograr una fantasía de la crucifixion y la “manipulea para lograr sus propositos.” El “cambia los significados.” Su interpretación hace de su personaje alguien que parece tan razonable, que no transmite, a pesar de sus acciones, esa oscuridad que atrae a Camille hacia él. Al mismo tiempo, esa pose recomforta a una audiencia no familiarizada o con miedo a esa Oscuridad.

Dave piensa en Elisa

Por otro lado, en el papel de la “gay” Elisa, Natacha Petrovich trata de ser  la Santa Julia, que acompaña a la Santa Eulalia de Camille, lugar que será asumido eventualmentre por Veronica Paintoux, en el papel de Gabrielle, por lo que es recompensada con la estocada de una lanza y tambien siendo colgada de una cruz.

El enlace mas debil es Dave, interpretado por Erik Antoine, que bromea y esgrime un revolver…

Y hay un revolver

Pero la osadía en presentar un fetiche que no es aceptable socialmente bajo una luz simpatética, así como la convincente realización y plasticidad de las escenas de crucifixion, marcan un audaz comienzo.

La crucifixión de Camille