OLALLA, LA ABSTINENCIA DE LA SANGRE
Por Carlos Gutiérrez A.
(periodista cultural y profesor de literatura sin ítem)
Crítica públicada el lunes 25 de julio de 2016 en el diario de Sucre Libertador
La cineasta norteamericana Amy Hesketh, residente en Bolivia, acaba de presentar su nueva película en el Festival de Cine de Mexico FERATUM (Cine de horror y ciencia ficción). Esta película ha recibido buenas críticas. La misma es una adaptación de la obra de Robert Luis Stevenson con una sazón boliviana. Y aunque tiene un estilo victoriano posee topónimos andinos sutilísimos: La Paz de los años 50 y Potosí decimonónico. En Bolivia ya se estrenó en La Paz y tambien en Europa. Esta es una aproximación a esta película vampirezca.
La película huele a muerte (si tiene olor), qué digo “huele”, hiede a muerte. Los personajes se arrastran pálidos por las habitaciones (las percepciones sensoriales se tornan difusas). Son vampiros que no sufren de fotofobia. Han aprendido a tolerar la luz solar. No obstante no pueden con su vicio atávico sanguinario.
La película es un homenaje al rancio y sempiterno Drácula de Bram Stoker y todo su séquito de criaturas góticas. Una visión más melancólica pero que conserva el leiv motiv príncipe. Podemos ver desfilar los fantasmas de Drácula desde Nosferatu, a los vampiros que no quieren comer sangre (lucy liu en Rise, Cazadora de Sangre), y un destello grato, la obra de Edgar Allan Poe, hasta la paródica reminiscencia de El Joven Manos de Tijera en el papel que interpreta Alejandro Loayza.
EL INCESTO Y OTROS JUEGUITOS LASCIVOS
No se puede ver la película y no recordar el cuento de Edgar Allan Poe, La Caída de la Casa User (El incesto de los hermanos). Como una logia hermética.
Los pueblerinos no aceptan a esa estirpe maldita (Olalla y su familia). Por lo menos no de forma pública y explícita, sino soterrada. ¿Hay terror en la película? Sí, pero ¿para quién? En términos bradburyanos estamos ante una paradoja casi inverosímil, incongruente, descabellada pero posible. El espectador puede asistir al primer linchamiento y a la caza de brujas.
La tragedia de estos seres radica en que no tienen poderes sobrenaturales. No se transforman, no vuelan, etc. Estos insepultos son frágiles y todos saben donde viven. Ellos son los aterrados. Como lo personajes de bradbury, Crónicas marcianas: son los marcianos los atacados; Fahrenheit 451, los bomberos queman libros, no apagan incendios y Los Visitantes (Un cuento), una familia de vampiros tiene un hijo enfermo (no le gusta la sangre).
Casi se podría decir que el espectador respira un ambiente de pólvora, uno no sabe en qué momento va a estallar una bomba que está debajo de todos. Qué terrorífico debe ser para un vampiro venido a menos, desmistificado, casi llegando al escarnio, a la humillación vivir en la zozobra de ser linchado.
Un vampiro tendría que morir con jerarquía, con una estaca, con un Van Helsin por enemigo. En otras palabras Olalla ha sido humanizada por su creador. Al estilo de Richart Matheson que aporta en su novela todo un razonamiento científico de lo que son los quirópteros humanos (1).
EL EROTISMO, OTRA FORMA DE DERRAMAR SANGRE
La película llega al cenit con el sadismo y el masoquismo que practican las hermanas y el tío. Parafernalia de azotes, sodomía, lujuria, etc. Hasta en el linchamiento de Olalla se puede percibir un morbo colectivo y justificado. Drácula es la exaltación mayor del erotismo: la succión de la sangre, los mordiscos, hasta el canibalismo, etc.
Hay, sin embargo, en el erotismo de Amy un sadismo que vuela como hoja al viento. No hay, lo que se dice en Derecho, ensañamiento. Hay, sí, un coqueteo. Maniatada, Olalla es fustigada por el tío con un látigo, pero fustigada con la fuerza de un matamoscas.
Después es castigada como niña mala en rodillas de papá. Pocas escenas avivan el erotismo por derroteros tan incongruentes. Es como la escena de la ducha de la película Psicosis (2).Uno no sabe si excitarse o aterrorizarse. ¿Cómo la violencia puede generar erotismo? Es el aporte de esta directora al cine boliviano. Cine gótico-erótico de terror. Francis Ford Coppola nos muestra su erotismo en Drácula, pero es un erotismo machista.
Además, en la película ronda el fantasma de David Linch (3). Se asoma en el baile grotesco al final de la película.
El simbolismo
El elemento identitario en esta cinta es la sangre. La sangre como virtud o como vicio. Si hablamos de una tradición judeocristiana convenimos en que Jesús tuvo que derramar su sangre para salvar al hombre, por lo mismo murió en la cruz. La virtud lo llevó al calvario. En Olalla fue el vicio. Los malos hábitos arrastran a los vicios. En este caso es por la gula (o ¿el hambre? que es condena a muerte la madre de Olalla (¿redención?).
El apetito desmedido y de ahí, un elemento interesante, que es, si se quiere, una tautología de la Biblia: La manzana. La fruta apetecida. El huésped y Olalla no se resisten y caen en desgracia. Fernando Sabater dice que es la exageración, el desequilibrio el que convierte un hábito en pecado capital (4). Olalla, a su vez, curiosamente, es tentada con una manzana.
La sangre, la cruz y la manzana son referencias bíblicas imbricadas en esta historia. Cristo estaba como un simple mortal, Olalla lo mismo. También podría decir que si la gula está presente, también la abstinencia. Olalla tiene que abstenerse de beber sangre para vivir (contra la gula templanza). No lo logra. Jesús ayuna en el desierto 40 días y el logralo le aproxima a la virtud, a su condición de divinidad.
En esta película se aborda el tema del vampirismo desde la óptica femenina. Amy hesketh elige bien la obra a filmar. No es el clásico Drácula. La madre de Olalla y Olalla sufren su condición de mujer. La madre no escapa de los pobladores que la quieren linchar por amor a sus hijas. Olalla se rebela y prefiere morir antes que seguir oprimida.
El único poder sobrenatural o natural que tienen ellas es la seducción. Ambas atraen a sus víctimas a través de sus encantos: la madre recatada y amante de los libros.
La hija más desinhibida exponiendo los encantos de su piel. Pero hay un rasgo característico que las identifica. La fragilidad. A ambas se las ve tan frágiles y desvalidas que da ganas de entregarles el cuello a ojos cerrados. Y ¿cómo no? Si ella parece un ángel ebúrneo, una Eva caminando por el paraíso con su ropaje de piel. Y ¿Por qué no decirlo? Una forma de canonizar a estos seres vituperados.
Drácula es la exaltación mayor del erotismo: la succión de la sangre, los mordiscos, hasta el canibalismo, etc.
LA PELICULA
Los primerísimos planos otorgan a la película una atmosfera intimista. Parase que el ángel sanguinario y su hermana hablaran confesándose secretos en una iglesia o una biblioteca. El espectador no tendría otro remedio que acercar el oído. Hubiera preferido que los espacios sean más góticos y nocturnos, pero el director prefirió escenarios diurnos y con mucho sol. Esto otorga a la película una tensión natural sin necesidad de efectos especiales. El mérito está en la actuación y el maquillaje.
Es el vicio o la virtud el que nos condena a una muerte en la sociedad. La gula o la gordura, el sacrificio del amor, la ira seguida de violencia, la lujuria y el sexo. ¿Quiénes son los monstruos que no pueden controlar sus apetitos? Todos deberíamos morir en una cruz o ya lo hemos hecho.
Por lo demás la trama se desarrolla con tensión y entretenimiento. Más de un cándido caería como mosca en las redes de Olalla. El erotismo se ve tan vivo hasta en la muerte de la madre de Olalla. ¿Rabia rodeada de morbo? ¿Los linchadores están enfurecidos o excitados?
Un homenaje como dije a Drácula y a la pluma del genial escritor que, contestatario y disidente arremetió contra el puritanismo gazmoño victoriano, cosa que se ve en la película. La más pura y genuina exaltación de la lujuria o el apetito carnal que anida en todo ser humano. Una desbocada manifestación de los instintos libertos. La abolición de los sentidos que en esas épocas en Bolivia y el mundo eran reprimidas. Mujeres que Vivian en esa escafandra de hipocresía y represión de sus deseos. Bella forma de pintar este fresco de horror y belleza.
- (1) Matheson Richard, Soy Leyenda
- (2) Psicosis, Alfred Hitchcock
- (3) David Lynch, El Hombre Elefante
- (4) Sabater Fernando, Los Siete Pecados Capitales.