Entrevista con Jac Avila (director) y Amy Hesketh (protagonista) de MALEFICARUM

La siguiente entrevista apareció en SearchMyTrash en noviembre del 2011, poco después del lanzamiento de Maleficarum al mundo.   Mike Haberfelner, Austria, entrevista a Jac Avila, director de Maleficarum y la protagonista Amy Hesketh.

Para empezar, nos pondremos al día: ¿De qué trata la nueva película Maleficarum?

Jac: Es la historia de dos hermosas jóvenes que caen en manos del Santo Oficio, mejor conocido como La Santa Inquisición. Toma lugar en una ciudad andina, no nombrada, que fué parte del Santo Oficio de Lima, el cual abarcó la mayor parte de América del Sur.

Una de las mujeres, Francisca, es heredera de tierras y fortuna – es católica. La otra mujer, Mariana, es anglo-sajona y luterana – ambas cosas que no eran bien vistas en esos tiempos y esas partes del mundo.

Amy, ¿cómo enfocas un papel tan sacrificado  como el de Mariana en Maleficarum

Amy: Fué difícil para mí. Soy actríz metódica, así que realmente me meto en el papel, me convierto en el personaje. Es difícil interpretar a un personaje tan diferente a tí, fuera del contexto de la época actual. Soy una mujer contemporanea, con un punto de vista muy distinto al de Mariana, entonces no me puedo preguntar: ¿Qué haría yo en esta situación?” Tengo que pensar en qué haría Mariana. Requiere imaginación y un poco de investigación para crear ese personaje.

Mariana es alguien que esta en el lugar equivocado en el momento equivocado. Es una viuda protestante, sin familia, y no protegida por un hombre. Esto no era considerado correcto en ese tiempo. Es albergada por una huerfana próspera e inician una relación lesbiana. Entonces es enjuiciada por la inquisición. Es alguien que lógicamente debería rendirse, pero sigue aguantando a pesar de ser torturada brutalmente y ver que a su amante tambien la torturan. Tiene un espiritu fuerte.

Amy Hesketh es Mariana de Castro

Tuve momentos duros filmando los momentos más patéticos en el drama de Mariana. Fué difícil deshacerme de tanto sufrimiento y miseria, y quería llorar aún más despues del “corte,” solo por la símple simpatía que sentía para las víctimas. Creo que afecta a mi “química de felicidad” o lo que sea, despues de un día entero de eso.

Jac, Maleficarum es tan intensa en su contenido como en su estílo. ¿Qué hiciste para que el elenco (y me refiero especialmente a tus dos protagonistas) se sienta cómodas durante el rodaje?

Jac: En el caso de Amy nunca había duda de cuán lejos estaba dispuesta a ir, es más, ella misma diseñó muchas de las situaciones. Para Mila, por otra parte, esta es su primera película, el comienzo de su carrera. Tuvimos capacitaciones unas semanas antes de comenzar el rodaje. Durante ese tiempo, hablamos de lo que pasaría, ensayamos algunas de las escenas difíciles.

Mila Joya en Maleficarum

Un tema que salió a la luz en los ensayos, fué el de los desnudos. Me dijo que nadie, ni su propia hermana, la había visto desnuda. Entonces tuvimos que trabajar con eso hasta que se sienta cómoda.

Existe el elemento de confianza, y tuve que ganarme la suya.

Cuando estabamos rodando, empezé filmando algunas escenas con Amy mientras Mila trabajaba como mi asistente – ella trabaja tambien detrás de las cámaras. Creo que al ver la comodidad de Amy, trabajando con los otros actores, hizo que se sienta más cómoda después.

Una vez que comenzamos, ella estaba muy cómoda con su papel y las situaciones. Vale decir que filmamos trés películas casi al mismo tiempo y ella tenía desnudos en las tres – lo hizo muy bien.

Maleficarum contiene bastantes escenas violentas de tortura que no pueden haber sido símplemente efectos especiales (y puede que me equivoque aquí), y han debido sentir dolor de verdad. Las escenas largas de azotes o al ser quemadas en la hoguera. ¿Cómo se manejan estas escenas como director, y como actríz/víctima? 

Amy en la hoguera.

Jac: No es la primera vez que hago escenas de ese estílo como director. Martyr siendo otra película donde las exigencias para los actores han sido muy altas. Pero es un tema delicado. Mi primera preocupación es la de seguridad para todos los involucrados y, en el caso de Maleficarum, Amy tenía el mayor riesgo. Entonces trabajamos los detalles de cada escena para lograrlo de la mejor manera posible y con las condiciones más seguras posibles.

Hay siempre riesgos, por supuesto, como con cualquier cosa. Trabajar con luces fuertes y todos esos cables eléctricos por todo lado ya implica un riesgo.

Pero tuvimos mucho cuidado, lo cual no significa que las protagonistas no sufrieron un poco. Pero siempre tenían la última palabra.

Escenas como la hoguera fueron planificadas y elaboradas de tal manera que no voy a revelar aquí, pero Amy nunca estuvo en peligro de ser consumida por las llamas. Ahora, el caballo de madera, esa es otra historia… No se qué fué peor para Amy, el caballo de madera o el ser bronceada “al espiedo” sobre carbónes encendidos.

Una cosa que siempre me da nervios en estos casos es el no saber cuando la actuación para y la realidad comienza. Veo a Amy actuando la escena y es una actuación tan realista que es difícil saberlo.

Eric Calancha en Maleficarum.

Amy: Yo creo mucho en lograr el realismo en una película, y entonces debo sufrir por mi arte. Pero nunca sufriré hasta un punto del que no me pueda recuperar. Hay una línea entre la incomodidad y el dolor. Utilizamos efectos especiales, bastantes. Es una película después de todo.

Cualquiera que hace estas escenas tiene que ser muy observante; el actor tiene que saber cuando decir “corten” si es necesario antes que el director. Tambien pasamos mucho tiempo contemplando lo físico de una escena, como funciona mecánicamente. Y siempre consideramos que lo que un actor puede hacer, otro tal vez no. Soy una persona pequeña y activa, entonces físicamente soy capaz de hacer cosas que mi co-protagonista Mila no puede, y ni debería intentar.

Jamás haría algo que me podría dañar permanentemente. Quisiera sobrevivir para actuar en otras películas.

Más allá de la tortura, Maleficarum se puede ver tambien como una gran historia de amor. ¿Se podría comentar sobre esa interpretación de la película? Mariana y Francisca

La historia de amor es central para todo el drama. Es por su amor que se meten en problemas y es el amor lo que las lleva a través de la historia a las feas consecuencias y más allá. ¿Es una gran historia de amor? Me gustaría pensar que sí.

Las mujeres vienen de mundos diferentes. Francisca es de orígen español, católica y muy próspera…y es la única heredera de la fortuna de sus fallecidos padres. Mariana, en cámbio, es anglo-sajona, luterana y pobre; su esposo, un boticario, murió y la dejó en la calle.

Pueblo chico infierno grande

Estas mujeres viven en un pueblo donde todos se conocen. Hay un dicho: “pueblo chico, infierno grande.”

Entonces, Mariana está en los labios de todos, y en sus mentes. Los chismes en el pueblo se concentran en las dos jóvenes y no es un chisme amistoso, muy lejos de eso.

Así que son el enfoque del pueblo para la superstición, el odio, la ignorancia e intolerancia.

Pero su amor es más grande que todo eso y el sufrimiento solo fortalece a ese amor. Entonces se podría decir que es una historia romantica.

 

Mariana sufre el tormento del caballete.

Amy, ¿es verdad que tambien construiste los mecanismos de tortura que se usan en Maleficarum, como el potro y el caballo de madera? ¡Tienes que comentar un poco sobre eso! 

Amy: Es verdad que yo diseñé todas las herramientas metálicas y construí los mecanismos de madera que se usan en la película. Me gusta trabajar con mis manos. Soy buena carpintera, ya que de niña yo tendía a ser un poco “macha.” Mi padre quería que yo sea una mujer moderna y auto-suficiente.

Yo contemplé bastante sobre los implementos de tortura, como el caballo de madera. Quería que se vean realistas, pero no quería que Mila o yo seamos lastimadas por algo demasiado real. Hay un punto donde tienes que decidir entre hacerlo realista o símplemente no incluír esa tortura en la película.

 

Maleficarum es un film sobre la inquisición en el siglo 17 en Perú. Que te convenció de que podía hacer una película de época con un presupuesto relativamente modesto?

En la calle Jaén

Dos cosas. Primero, un contribuyente dió dinero semilla para el proyecto, mayormente para que podamos construír algunos de los aparatos, como el que se utiliza en la escena “al espiedo” por ejemplo. Segundo, el hecho de que Amy me dijo que podría hacer la vestimenta ella misma. Reveló este secreto que había tenido muy guardado porque tenía miedo que yo explotaría ese talento. Pero ya que salió el secreto, puede anticipar mucha explotación en el futuro. Era muy importante para la historia tener estos dos elementos – el vestuario y los aparatos de tortura. Todo lo demás fué fácil conseguir.

Hay un mercado gigantesco aquí, en la ciudad de El Alto, encima de La Paz. Se puede encontrar de todo ahí. A Amy le encanta ir a conseguir telas de todo tipo. Utilizó muchas de esas telas para fabricar el vestuario.

Hay muchos herreros, que construyen cercas y cosas de ese estílo. Encontramos a uno con inclinaciones artísticas que construyó las cadenas y manoplas; y la parrilla para la escene “al espiedo.” Amy construyó el caballo de madera y tambien el potro; tiene mucha habilidad con herramientas.

Estos fueron los elementos básicos para la realización de Maleficarum. Todo lo demás cayó en su lugar como por arte de mágia … o, mejor dicho, brujería.

Maleficarum parece ser una película controversial por varias razones. ¿Qué se puede decir sobre la reacción del público hasta el momento? 

Jac: Estaba muy consciente que sería una película controversial y creo que cuando la mostremos aca en la cinemateca, si es que la aceptan, causará que muchos críticos se saquen los pelos de la desesperación y enojo … y estaba siempre dispuesto a correr ese riesgo.

La hoguera

Tengo que decir que hasta el momento, aquellos que han visto la película estan muy satisfechos. Una cosa de estos nuevos tiempos en que vivimos es que nosotros, los cineastas, ya no dependemos de terceras personas como distribuidoras o programadores…tenemos una conección directa con nuestro público mayormente por el internet. Así que recibimos comentarios directos y varían entre “Wow, increíble” a “esta es la mejor que he visto del género” y cosas así.

Hubo promoción inicial de la película a través de fóros y redes sociales; y ahí se encuentra nuestro público. Las reacciones son fantásticas. En tres días, logramos en ventas lo que acostumbramos lograr en dos meses para un título.

Para dar un poco de perspectiva, cuando lanzamos Martyr, en sus primeras horas de circulación por internet recaudamos más que lo que logramos en dos semanas en la Cinemateca de La Paz. Pues, Maleficarum recaudó en tres días lo que Martyr ha recaudado hasta la fecha en total.

Entonces la reacción del público ha sido fantastica.Y además, Maleficarum  estimula las ventas de Martyr, lo que es genial.

¿Y qué crees de la forma en que la iglesia católica actual maneja uno de sus periodos más oscuros – el de la inquisición?

Jac: Hay un giro al final que pueda o no ser visto como felíz, dependiendo del punto de vista. Pero como basé la historia en los archivos del Santo Oficio de Lima, que abarcó prácticamente toda América del sur por debajo de Ecuador, tomé algunos hechos – como los testimonios y algunos personajes, como Mariana de Castro, que fué condenada a la hoguera. Y sí hay una duda histórica sobre si murió o no ahí.

La iglesia católica es una institución de 2000 años con una historia larga, rica y loca llena de momentos positivos y negativos. Influenció el desarrollo de la civilización occidental. Los tiempos de la inquisición fueron tiempos de mucha intolerancia, guerras religiosas, etcetera, y la iglesia tenía un gran control sobre el poder del hombre. Creo que la inquisición es un tema humano. La intolerancia y el odio, la superstición, etc…son todas características humanas y la iglesia en sí está compuesta por seres humanos.

Si no me equivoco, el Papa Juan Pablo II se disculpó por la inquisición. Creo que eso es algo bueno, reconocer los pecados de la iglesia a través de la historia – que son bastantes.

Jac dirige a Amy.

Amy, unas palabras sobre Jac Avila, el director; y Jac, unas palabras sobre Amy Hesketh, la actríz, ¿qué pueden decir sobre el intercambio de papeles en las películas de Amy?

Amy: Tengo mucho respeto hacia Jac como director y actor, y es un respeto recíproco. Él sabe que voy a dar el 100% en un papel, entonces me permite hacerlo y no trata de dirigirme demasiado. Hablamos mucho sobre el personaje antes de empezar el rodaje.

Al dejarme libre de hacer lo mío, Jac se abre a la posibilidad de momentos que no se darían de otro modo – ya que no están en el guión y solo salen a la luz cuando un actor tiene la libertad de convertirse en el personaje.

El mejor momento para mí en la película es cuando me arrastro hacia Francisca y le empujo la pierna con mi cabeza. Cuando veo eso, me conmueve. Pero no quiero sonar presumida.

Escena de Le Marquis de la Croix

Como actor, Jac es un poco difícil, puede ser algo arrogante. Y no le gusta mucho ser dirigido. Tiene su propia idea de lo que el personaje debería ser (su director interno saliendo a la luz) y yo, claro, tengo la mía. Entonces me tengo que poner fírme y pelearlo en casi todo.

Pero el resultado final es fantástico, porque lo conozco muy bien a Jac y sé lo que puedo sacar de él. Se trata de una…digamos…manipulación habilosa…eh…por decirlo así.

Jac: Amy es una gran actríz, pero tambien es muy buena directora y debo decir que sus capacidades como productora son impresionantes. Como actríz, entrega más de lo esperado en un papel. Hay una escena, después de que Mariana es violada y se arrastra a donde su amante – Francisca – se encuentra amarrada e inconsciente. Cuando llega a su amante, Mariana está de rodillas, llorando, mirando hacia arriba. Esa escena es la más difícil de ver para mí. Amy interpreta al personaje con una tristeza tan profunda y una desesperación que me rompe el corazón cada vez que lo veo; y tuve que verlo bastante, mientras editaba la película…entonces el hecho de  que me afecte de tal forma es la prueba que es una actríz increíble.

Como directora, sabe lo que quiere entonces, si bien me cuesta someterme, lo hago… Al principio con reticencia, y después con gusto… Debo decir que trabajar solo como actor bajo su dirección es algo que me relaja. Puedo descansar, relajarme y permitir que el personaje se apodere de mí y que los demás sufran.

Afiche de Martyr

Amy, en nuestra anterior entrevista, Jac me contó que querías trabajar con él después de ver su película Martyr – una película sobre una mujer actual reviviendo los tormentos de una mártir del tercer síglo. ¿Podrías elaborar sobre eso? 

Amy: Vi Martyr en un festival en Oruro, Bolivia. Estaba viajando por Sudamérica. Lo que vi fué una película hermosa, como una pintura, con muy buenas actuaciones y una temática controversial. Esencialmente, lo que yo quería hacer.

Y después de escuchar a Jac en una conferencia sobre cine digital en el mismo festival, descubrí que había logrado Martyr con un bajo presupuesto y mucho talento del elenco y el equípo técnico. Pensé que tendría que convencer a este tipo a que me lleve a su productora y apoye mis proyectos. Y lo hice. No tuve que convencerlo demasiado.

Sirwiñakuy estaba en producción dos años después, luego Barbazul, y después  Le Marquis de la Croix. Y ahora estoy planificando mi cuarta película para 2012.

En las películas dirigidas por ustedes, veo corrientes fuertes de sadomasoquísmo. ¿Podrían comentar sobre eso?

Jac: A mí me atrae esa temática, claro está, en todos sus aspectos. Creo que es lo que más me interesa. Si yo fuera gay, estaría haciendo películas con un elemento homosexual en ellas… Creo que es por mis propias tendencias sadomasoquístas y no tengo miedo de admitir eso, es más, creo que lo estoy alardeando. No sé si uno nace así o si la cultura influencia y forma las cosas que nos atraen.

Me criaron católico con las imágenes de mártires a mi alrededor y la virtúd de sufrír en el más álto nivel del bien. Supongo que eso tuvo algo que ver con como resulté ser, pero hay muchas personas con la misma crianza que no tienen los mismos gustos. Entonces, creo que ya estaba en mí.

Amy dirige a Vero y Jac en Barbazul

Amy: A mí me atrae lo que se define como sadomasoquísmo porque es parte de quienes somos como seres humanos. Ha estado presente por siempre en la cultura y sociedad. Esencialmente, todos los seres humanos son animales en el sentido que tenemos instintos. Todos tenemos sentimientos que tal vez no comprendemos, el sentimiento de dominar o ser dominados. ¿Por qué será que algunos son líderes y otros prefieren no serlo? Es un tema universal.

¿Qué hacemos con estos instintos en un mundo moderno? Los convertimos en fantasía, los sexualizamos, hacemos rincones y los colocamos ahí – los definimos como otra cosa. Existen elementos de sadomasoquísmo en muchos de los cuentos infantiles tambien, así que estamos expuestos al concepto de transmutar nuestros instintos desde muy temprana edad.

¿Algún proyecto futuro del que quieran comentar? 

Jac: Tenemos dos lanzamientos próximos, Barbazul y Le Marquis de La Croix, ambos dirigídos por Amy y protagonizadas por mí… Interpretado a Barbazul, un asesino de mujeres, y Le Marquis, basado en De Sade, han sido realmente las experiencias más intensas que he tenido.

Amy: Siwriñakuy, mi debut – que se proyectó en la Cinemateca Boliviana durante 5 meses – será lanzada en DVD pronto. Estamos esperando los subtítulos en alemán. Y estoy emocionada por los lanzamientos de mis peliculas Barbazul y Le Marquis de la Croix.

Estamos buscando las locaciones para mi siguiente película, y planeamos filmarla en 2012.

¿Páginas web, Facebook y lo demás?

Para descargar Maleficarum: http://movies.vermeerworks.com

Para comprar el DVD de Maleficarum: http://vermeerworks.com/store/movies

Facebook de Jac: http://www.facebook.com/jac.avila

Facebook de Amy: http://facebook.com/amyhesketh

Blog de Jac: http://jacavila.blogspot.com

Blog de Amy: http://amyhesketh.blogspot.com

¿Algo más que quieren comentar que se ma ha olividado preguntar?

Jac: Con respecto al estílo de la película. Cuando empezé a rodar Maleficarum,  tenía una idea de que les pasaría a las dos mujeres, de principio a fín. No era necesario un guión para eso. Era cuestión de hacerlas pasar por el sufrimiento de forma casi secuencial. Sin embargo, para construír la historia de fondo utilizé los archivos de la inquisición peruana. Decidí intercalar las secuencias de tortura con los testimonios malditos de la gente.

Son testimonios genuinos de esa época. No tuve que inventarlos, únicamente los adapté a la historia. Tenía mucho de donde escojer. Trecientas páginas de historias absurdas.

Es parecido a Rashomon, donde el mismo evento es relatado de diferentes puntos de vista. El único problema es que la mayoría de los puntos de vista van en contra de las mujeres.

Puedo decir, honestamente, que escribí ésta película con la cámara.

¡Gracias por la entrevista!

© por Mike Haberfelner