MALEFICARUM: DEL AMOR A LA TORTURA Y EL SUFRIMIENTO

Jac Avila dirige a Amy Hesketh en el set de Maleficarum.

Debo confesar que estuve en el set de la nueva película de Jac Avila, Maleficarum, una propuesta que nos traslada a los tiempos de la inquisicion de la mano de un director que no vacila en poner a prueba todo lo que lo rodea, como un médico que bisturí en mano se prepara para realizar una prolija disección en un cuerpo. No tengo claro si para curarlo o para abrirlo pero sea cual fuere la intención, lo hará con gran profesionalismo y de manera casi aséptica.

Mila Joya y Amy Hesketh en una escena de Maleficarum

Ahí es donde entran en juego las dos actrices principales Amy Hesketh y Mila Joya quienes aceptaron intervenir en esta cinta, casi sin saber lo que les esperaba y como Avila iba a moldear su actuación hasta límites insospechados, logrando algo que pocos directores hacen y eso es que el dolor de la tortura y la crudeza de las escenas trasciendan la trama y se instalen en el propio set, donde todo era silencio pero la sorpresa se podia observar en los ojos de los colaboradores, en los gestos disimulados de los gaffers y en los cuchicheos de los demás actores que intentaban decir: somos cómplices de la salvajada.

Una serie de instrumentos de tortura, propios de la época junto a una increible locación que nos transporta a una prisión del siglo 17 nos reciben con la novedad que implica estar en un set de cine, todos dicen casi de manera melosa, que bonito o que bien hecho, alguno se aventura a comentar que no parece hecho en Bolivia, toman un cafecito y hablan de cosas coyunturales, es casi como un descanso novedoso… hasta que llega Jac Avila y ahí todo cambia de manera increible.

En instantes, la atmosfera se llena de gritos, golpes de látigo, moldes al rojo vivo, jadeos y el consabido fuego purificador siempre presente para purgar a los que se han atrevido a pecar contra la iglesia y sus códigos.

Avila enarbolando su bisturí o su batuta o su sonrisa crea un ambiente que transita una linea fronteriza entre el talento y la osadía, entre el arte y la maldad, entre la ficción y la historia mientras Amy y Mila se sumergen en el mar de sus desdichas, hasta que casi de manera milagrosa llega la esperada palabra… corte.

Pasan los dias y las semanas y la historia toma forma, aunque de forma cruel, dos jóvenes que conocen el amor, dos jóvenes que transitan la vida de manera cándida e inocente, dos jóvenes que esperan algo bueno del futuro hasta que tienen la desdicha de caer en manos del Santo Oficio, ahí cambiará todo y pasarán del amor al dolor mientras la iglesia prepara el juicio y Jac prepara su batuta o su bisturí o su sonrisa mientras el resto de los testigos de set nos preguntamos… como diablos nos metimos en esto?

R. L. L.

Jac Avila prepara a Amy Hesketh mientras Mila Joya observa.

Maleficarum está a la venta en DVD y VOD (Downloads)

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